¿Por qué es importante que la mantilla para doma se ajuste bien al dorso del caballo?
Tu mantilla para doma debe ser lo suficientemente larga para cubrir la parte trasera del sillín y lo suficientemente ancha para brindar una cobertura adecuada. Verifica que la mantilla no sea demasiado grande ni demasiado pequeña, ya que un ajuste incorrecto puede causar molestias o restricciones de movimiento. Asegúrate de elegir una mantilla que se ajuste correctamente al tamaño del dorso del caballo.
Coloca la mantilla correctamente, es decir, que esté alineada para que quede centrada sobre el lomo del caballo, desde la cruz hasta la grupa. Asegúrate de que no esté arrugada ni torcida.
Verifica la posición de la mantilla para doma, comprobando que esté colocada en la posición correcta. Debe estar situada debajo de la silla de montar y no debe sobresalir por los bordes de la silla.
Para saber si la mantilla para doma está colocada correctamente, observa el movimiento del caballo. Monta y observa cómo se mueve con la mantilla puesta prestando atención a cualquier signo de incomodidad o irritación, por parte del caballo. Si notas alguna molestia, ajusta nuevamente la mantilla o considera probar con una mantilla diferente que se adapte mejor a la morfología de tu caballo.
Recuerda que cada caballo es diferente, por lo que es posible que necesites ajustar la mantilla varias veces para lograr el ajuste perfecto. Presta atención a las señales del animal y realiza los ajustes que sean necesarios para garantizar su comodidad durante el trabajo de doma.
Transpirabilidad, acolchado y confort; Las claves de una mantilla de doma perfecta para el caballo y para el jinete
Opta por una mantilla de doma fabricada con materiales transpirables y de alta calidad. De esta manera conseguirás una buena ventilación y evitarás la acumulación de humedad, ayudando a mantener al caballo fresco y cómodo durante el ejercicio. El acolchado debe ser lo suficientemente grueso para proporcionar amortiguación y protección al dorso del caballo, pero no tan grueso como para crear un espacio excesivo entre el dorso y el sillín.
El acolchado de tu mantilla debe distribuirse de manera uniforme para evitar puntos de presión y rozaduras. El confort tanto para el caballo como para el jinete es fundamental, ya que un ajuste incorrecto o un acolchado inadecuado pueden causar molestias y afectar el rendimiento. Una mantilla para doma mal ajustada puede afectar a la postura y la comodidad del jinete. Si la mantilla es demasiado gruesa, puede elevar la silla de montar, creando un desequilibrio en la posición del jinete, afectando a la estabilidad y la capacidad del jinete para mantener una posición correcta.
En Cal Rei podemosasesorarte para que encuentres una mantilla para doma de gran calidad que se adapte al máximo a tus necesidades y preferencias.